Y si Lavin se baja ?

Una opción que hasta hoy no ha sido planteada es que el perseverante y mediático Lavín renuncie a seguir la cada vez más lejana Presidencia del país. Si hace unos días esto parecía nada más que política-ficción, ha ido tomando más cuerpo en los últimos días debido a las sendas estocadas que le han propinado sus propios correlegionarios Longueira y De la Maza. Este último sostuvo, ya sin eufemismos, que Bachelet será la próxima presidenta de Chile. Dentro de ese contexto, la posición de Lavín es mucho más frágil que la de Piñera aunque lo aventaje por uno o dos puntos en las encuestas, ya que Lavín estuvo a 31 mil votos de ser Presidente hace seis años. Cualquier resultado inferior a ese es un fracaso rotundo y definitivo. Así como van las cosas Lavín no sobrevivirá a este diciembre aunque supere a Piñera. En cambio, el abanderado de RN puede seguir haciéndonos creer por unos años más al menos que la suya es una carrera en alza, por gradual que esta sea.
      Dentro de este paisaje cargado de desesperanza para la derecha chilena, el orgullo de la UDI es la primera gran piedra de tope que detiene la bajada de Lavín. La segunda es que la propia UDI puso de caballito de batalla a Lavín para dirimir cúal de los partidos de la Alianza se quedará con el liderazgo del sector.
      Lavín aún está a tiempo de evitar una muerte anunciada y, con su renuncia, activar de una vez una elección que ya parece definida. De ocurrir así y aunque su bajada no asegure automáticamente el traspaso de su votación a Piñera, al menos tendrá el beneficio de presionar un poco más a Bachelet para que muestre un poco más de la artillería pesada -de planteamientos más de fondo-, en vez de las oxidadas bayonetas con las que se han paseado los candidatos.