El egocentrismo de la PUC
Si a la UC le interesa que a su Universidad ingresen los mejores estudiantes del país sin importar su nivel socioeconómico, se está pisando la cola sola con su discurso de que la “se está coartando la calidad de la educación” ya que, con los actuales nivel de crecimiento de los aranceles parte importante de las familias chilenas no podrán pagarlo al contado. En un país donde la mediana del ingreso familiar es de 350 mil pesos mensuales, los aranceles sobre 2,5 millones anuales están más que probablemente socavando la movilidad social del país.
Pese a las declaraciones de Rosso hace algunos meses a La Segunda de sus intenciones de reformar el Consejo de Rectores, la UC no ha demostrado en la práctica una verdadera vocación de mejorar la calidad educacional de las universidades. Muy por el contrario, se ha mirado demasiado el ombligo con su meta de estar entre las 100 mejores universidades del mundo, cuando en verdad lo importante es que Chile tenga un mejor nivel educacional.
Tal vez lo bueno de la meritocracia es que esta se termina imponiendo en un mercado abierto internacionalmente no sólo por un debate valórico sobre su preferencia por sobre un modelo de sociedad más elitista sino que también por consideraciones de racionalidad económica. Sobretodo en el mercado de la educación superior donde la excelencia no está dada tanto por la formación de cada universidad sino que por la selección de los candidatos; es decir, por la capacidad de la universidad de atraer a los mejores alumnos.matias
5 comentarios:
No se puede acusar a la UC de socavar la movilidad social por su elevado arancel, sobre todo ahora que se aprobó que los 3 primeros quintiles tendrán 100% de beca+crédito de manera muy poco riesgosa.
En ese sentido, estudiar en la PUC tendría las mismas complejidades que estudiar en la UTEM: pago de locomoción, material, comida, alojamiento, imposibilidad de aportar a la familia con un trabajo tiempo completo.
No lo he resuelto aún, pero me parece sensato que las mejores universidades tengan un arancel mayor, no en una lógica oferta/demanda, sino porque, en general, una mejor universidad requiere más recursos para funcionar (al menos aquí en Chile, donde a diferencia de USA no contamos con inmensos fondos de donaciones).
Este ser "mejor universidad" debería venir dado por una ley de acretidación clara y sólida, donde el Estado tenga algo que decir sobre la Educ Superior, mal que mal es el que se pone con las platas (o al menos las avala). Pero claro, la ley como está saliendo se encuentra lejos de cumplir ese objetivo... en fin.
Discrepo de Pablo, coincido con Matías y añado un elemento no menor a tener en consideración. Si la PUC quiere ayudar o aportar a que se reduzca la desigualdad y la pobreza en el país, no es lo más adecuado decidir manejar los cupos de las carreras mediante la mera demanda.
Algún ejemplo?? Periodismo
¿En qué discrepas?
Puff como les encanta caer en juegos de lenguaje circulares.
1.-La PUC tiene objetivos.
2.-Lo que haga es bueno o malo de acuerdo a esos objetivos.
3.-Esos objetivos son buenos o malos de acuerdo a tus objetivos (o los míos, que pueden no ser los mismos).
4.-Cuando tienes múltiples objetivos, el juego se transforma en uno de optimización ("cómo logramos el máximo de A manteniendo B por sobre un mínimo").
5.-Cuando tienes múltiples evaluadores (ya que estamos en tu blog, "stakeholders"), con objetivos distintos (ver 3), terminas optimizando tu evaluación social (quedando bien con todos). La forma de hacer esto es confundir.
6.-Cuando les enseñas lenguajes complicados a los alumnos, y actúas paradójicamente, generas un círculo autoperpetuante (digamos, alumnos, y exalumnos divagando) en un juego inescapable de validación social.
7.-El costo de transacción se vuelve costo existencial en una suerte de esquizofrenia social en la que unos le creen a unos y otros a otros, pero muy pocos dan un paso atrás y se hacen la pregunta: "¿En quién me convierto con lo que hago?" "¿En qué tipo de universidad se transforma la PUC con los cambios que hace?"
8.-Tus objetivos tienen que ver con quien quieres ser. Todas tus decisiones son éticas.
Incluso luego del anunciado y explosivo aumento de becas y créditos el rol de las universidades -UC incluída- es bastante discutible a la hora de disminuir las desigualidades mientras quienes ingresan a ellas son intrínsecamente desiguales. Cuando el 6% de los estudiantes de universidades tradicionales son del último quintil de ingresos, uno no puede sino preguntarse qué está funcionando mal.
La UC se puede llenar la boca con que quienes llegan a ella no saldrán por razones económicas (lo que incluso me consta que no es así), pero se olvida que su responsabilidad se extiende a tener un rol en cómo llega la gente a ella. En quiénes podrán estudiar en la PUC. Proponiendo legislación, realizando estudios, cambiando su propia y cómoda realidad.
Es muy fácil asegurar el financiamiento de los estudiantes, si éstos no necesitan mayores ayudas. Sí, necesitan, pero aun así están alejadísimos de la realidad chilena, o de una distribución de estudiantes que permita declarar con justicia que la universidad es un ente que promueve la igualdad a través de la educación.
Hoy la realidad dista de ser así y fuera de los principios y supuestas obligaciones éticas tan manoseadas a la hora de los discursos y tan olvidadas a la hora de las decisiones, no existe ningun incentivo real para cambiar el ingreso (ergo el resultado final) de las universidades.
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